Hola, buenas noches, me siento un poco triste por como deje que pasaran las cosas. Pido su consejo sobre lo que pueda hacer.
Soy miembro desde pequeño, y siempre me he esforzado por guardar los mandamientos, sin embargo, hace algunos años caí en un mal hábito, en la masturbación, por un amigo que me dijo que todos a esa edad lo practicaban. La verdad es que no le di mucha importancia, hasta que un día quise probar y desde ahí en adelante siempre lo hice, tendría unos 17 años y empece a probar la pornografía y la cosa empeoro, fue hasta que decidí cambiar porque en el fondo sabía que estaba mal por la ley de castidad.
Hablé con mis líderes, todo mejoró tanto que hasta pude servir una misión de tiempo completo. A raíz de eso mis mejores amigos sirvieron misiones de tiempo completo.
Han pasado algunos años desde que regrese de la misión, y tristemente he caído en el mismo mal hábito de mi adolescencia, cumplo todos los demás mandamientos, y me esfuerzo por ser un ejemplo pues en mi barrio y en mi familia hay una buena imagen de mí, pero me siento como hipócrita, porque no cumplo con esta ley. Aunque sé que Dios siempre me escucha, siento mis oraciones vacías. Y en el fondo tengo miedo de que si todos se enteran, ya nadie me tenga confianza, lo cual me dolería muchísimo.
Espero sus consejos o ayuda.
Desde ya pido una disculpa porque siendo ex-misionero debería ser más fuerte pero reconozco que mi testimonio se ha venido debilitando.
2 Responses to “Hola, buenas noches, me siento un poco triste por como…”
Luciano Delgado
2014-11-30 17:47:24
Una vida de pecado puede ser limpia y cambiarse por medio de la expiación de Jesucristo.
Hola hermano. Élder Richard G. Scott dijo una vez: "...el Señor ve las debilidades en forma diferente a como ve la rebelión. Si bien el Señor advierte que las rebeliones de las que no se arrepientan recibirán un castigo, cuando habla de debilidades, siempre lo hace con misericordia." Es muy obvio que usted está luchando con una debilidad, no una rebelión. Todavía es un pecado, pero ciertamente hay esperanza para usted porque desea cambiar.
Me encanta la escritura de Isaías: ""Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana" (Isaías 1:18). Esta escritura se aplica a usted y a todos nosotros. A través de la expiación de Cristo, usted puede ser cambiado. Puede recuperarse de su pecado.
Hable con su obispo sobre estas dificultades. Él le ayudará a regresar al camino espiritual correcto. Tome medidas para evitar estas tentaciones en el futuro: utilice filtros en su computadora y ponga su computadora en un lugar público de su casa.
Sé que usted puede arrepentirse. Nunca pierda la esperanza. Nada puede colocarte fuera del alcance del sacrificio expiatorio de Cristo. Voy a orar por usted.
Anónimo
2015-02-04 17:55:05
Hernano Dios aún le ama desea que usted se arrepienta. Soy un joven de 16 años y tambien lucho con la masturbacion y otros desafios he hablado con mi obispo y aún despues he caido muchas veces más pero tengo como meta nuevamente no caer. Talvez le ayude leer el folleto llamado solo para varones jovenes del presidente paker y el manual de la iglesia para vencer las adicciones. Me siento bien de saber esto, antes pensaba que yo era el unico con estos desafios pero se que podemos lograrlo.
Le voy a pedir un favor: que ore por mi para que yo pueda vencer este desafio y otros muy similares que le acompañan. Yo orare por usted y tambien oremos por todos los hombres que tienen este tipo de desafios para que juntos logremos vencerlos. Me estoy preparando para servir una mision de tiempo completo. Le deseo mucha suerte, realmente le comprendo pues he sentido lo que usted siente. El señor nos ama y espera mucho de nosotros.
Me encanta la escritura de Isaías: ""Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana" (Isaías 1:18). Esta escritura se aplica a usted y a todos nosotros. A través de la expiación de Cristo, usted puede ser cambiado. Puede recuperarse de su pecado.
Hable con su obispo sobre estas dificultades. Él le ayudará a regresar al camino espiritual correcto. Tome medidas para evitar estas tentaciones en el futuro: utilice filtros en su computadora y ponga su computadora en un lugar público de su casa.
Sé que usted puede arrepentirse. Nunca pierda la esperanza. Nada puede colocarte fuera del alcance del sacrificio expiatorio de Cristo. Voy a orar por usted.
Le voy a pedir un favor: que ore por mi para que yo pueda vencer este desafio y otros muy similares que le acompañan. Yo orare por usted y tambien oremos por todos los hombres que tienen este tipo de desafios para que juntos logremos vencerlos. Me estoy preparando para servir una mision de tiempo completo. Le deseo mucha suerte, realmente le comprendo pues he sentido lo que usted siente. El señor nos ama y espera mucho de nosotros.