Tengo muchisisisismo tiempo sin asistir al iglesia, me imagino que son mas de diez año, deje de usar los garment, pero tengo un deseo en mi corazon de volver a la iglesia y cada vez que paso por el frente quiero entrar pero no me atrevo, siento mucha pena y verguenza, no me siento limpia para entrar, pero recuerdo lo bien que me sentia cuando estaba activa en la iglesia con un llamamiento y extraño eso, no se que me paso y no se como ocurrio el hecho de no asistir mas, no he orado, no he leido las escrituras, pero tengo deseo que no quiero que se valla, hace mucho tiempo que no me sentia asi, mi esposo no quiere acompañarme quizas porque sentira lo mismo que yo, mis hijas quieren ir y quizas me esten animando, que hago?, me aceptaran despues de tanto tiempo? O me excolmugaran por tener tanto tiempo sin ir? Aceptaran mi arrepentimiento y mi deseo de volver? Mi corazon me lleva hasta alla, me late muy fuerte cuando estoy cerca y no se que hacer? Ayudenme.
2 Responses to “Tengo muchisisisismo tiempo sin asistir al iglesia, me imagi…”
Fernando Ramos
2011-02-07 00:13:00
Hola hermana. Su mensaje es un ejemplo perfecto de cómo el espíritu de Dios puede tocar el corazón! El mensaje de Dios está muy claro en su caso: Él quiere que regrese a la iglesia. ¡Que bendición que sus hijas también quieren ir a la iglesia! Ir a la iglesia es muy importante para el desarrollo espiritual de un niño. ¡Qué maravillosa oportunidad para ellas también!
A través del sacrificio expiatorio de Jesucristo, podemos ser liberados de nuestros pecados.
No se deje engañar en pensar que sus pecados le hacen indigna de entrar en la capilla. La capilla es como un hospital para los espiritualmente enfermos, no un club para la gente espiritualmente perfecta. Si sólo la gente perfecta podría entrar en la capilla, nuestras capillas estarían vacías! Todo el mundo comete errores. A través de la expiación de Cristo podemos arrepentirnos de nuestros errores y podemos cambiar.
Le sugiero que hable con su obispo sobre su sincero deseo de regresar a la iglesia. Hágale saber que usted está arrepentida y con ganas de cambiar su vida. Estoy seguro de que él estará dispuesto a ayudarle. La inactividad no suele conducir a la excomunión, por lo que no es necesario que se preocupe por eso. Sólo se preocupe por su recuperación espiritual.
También le sugiero que entre en contacto con los misioneros mormones para pedir ayuda para volver. Que Dios te bendiga con la fuerza que necesita para encontrar la recuperación espiritual. Voy a orar por usted.
Anónimo
2011-02-09 18:52:12
Querida hermana, recuerdo un poco de un discurso que dio nuestro presidente de estaca hace muchos anos, y hablaba acerca de la conversion, entendi que la conversion es diferente al bautismo, una persona puede bautizarse y no estar convertida, puede ser que le guste mucho estar en la iglesia y disfrutar de las cosas que hace, pero eso no significa que esta convertida, entonces ahi esta la respuesta a su pregunta, no sabe porque dejo de ir a la iglesia, no sabe porque dejo de usar sus garments sagrados, no ha leido las escrituras, no ha orado, por supuesto no ha vuelto al Templo tampoco, hay muchas cosas que no ha hecho
En 10 anos, ha estado pasiva con su esposo y sus hijos, perdiendo, siempre perdiendo.
Como le decia sobre aquel discurso, aprendi que muchas veces cuando las personas se bautizan es como si tuvieran solo un pie dentro de un barco y el otro afuera, cuando estamos convertidos tenemos ambos pies dentro del barco.
Siempre le he dicho esto a todos, El Senor quiere que regresen, hermana regrese, ponga el otro pie dentro del barco, sea usted la primera con sus hijas, con seguridad su esposo la va a seguir, no ha dicho si ud, se caso en el Templo con su esposo y si sus hijas nacieron bajo el convenio, si no es asi es posible que el Senor le este jalando las orejas para que regrese y haga esa parte tan importante para nuestra salvacion y la de nuestra familia.
Hermana no la van a excomulgar por no asistir a la iglesia, lo que va a pasar es que va a haber fiesta en el corazon de los hermanos de la iglesia. El Senor esta listo para aceptar su arrepentimiento.
Quisiera compartir conusted algunas notas de un discurso dado por el elder Dale E Miller del quorum de los setenta.
A medida que la conversion madura y se sostiene mediante las obras del Espiritu Santo, el alma se sana y encuentra la paz.
Tenemos el relato del Profeta Alma, hijo, cuando narra la experiencia de su conversion a su hijo Helaman. El dijo haber llegado a darse cuenta de manera dramatica de sus pecados y de errores del pasado, y confeso haberse rebelado contra Dios. Pero despues se acordo de haber oido a su padre Alma profetizar concerniente a la venida de un Jesucristo, el Hijo de Dios, quien vendria a expiar los pecados del mundo. Alma dijo: Y al concentrarse mi mente en este pensamiento, clame dentro de mi corazon, Oh Jesus, Hijo de Dios, ten misericordia de mi que estoy en la hiel de la amargura, y cenido con las eternas cadenas de la muerte! Alma experimento dolor y culpa eternos, pero se dio cuenta de que habia una posible salida mediante la Expiacion. Despues continua: Y he aqui que cuando pense esto, ya no me puede acordar mas de mis dolores, si, dejo de atormentarme el recuerdo de mis opecados. Y! Oh que gozo, y que luz tan maravillosa fue la que vi! Si, mi Alma se lleno de un gozo tan profundo como lo habia sido mi dolor. Alma 36.
Hermana, tengo la seguridad de queusted la proxima vez que pase por la capilla va a entrar y habra gozo en los cielos por una alma que se arrepiente.
Le sugiero que hable con su obispo sobre su sincero deseo de regresar a la iglesia. Hágale saber que usted está arrepentida y con ganas de cambiar su vida. Estoy seguro de que él estará dispuesto a ayudarle. La inactividad no suele conducir a la excomunión, por lo que no es necesario que se preocupe por eso. Sólo se preocupe por su recuperación espiritual.
También le sugiero que entre en contacto con los misioneros mormones para pedir ayuda para volver. Que Dios te bendiga con la fuerza que necesita para encontrar la recuperación espiritual. Voy a orar por usted.
En 10 anos, ha estado pasiva con su esposo y sus hijos, perdiendo, siempre perdiendo.
Como le decia sobre aquel discurso, aprendi que muchas veces cuando las personas se bautizan es como si tuvieran solo un pie dentro de un barco y el otro afuera, cuando estamos convertidos tenemos ambos pies dentro del barco.
Siempre le he dicho esto a todos, El Senor quiere que regresen, hermana regrese, ponga el otro pie dentro del barco, sea usted la primera con sus hijas, con seguridad su esposo la va a seguir, no ha dicho si ud, se caso en el Templo con su esposo y si sus hijas nacieron bajo el convenio, si no es asi es posible que el Senor le este jalando las orejas para que regrese y haga esa parte tan importante para nuestra salvacion y la de nuestra familia.
Hermana no la van a excomulgar por no asistir a la iglesia, lo que va a pasar es que va a haber fiesta en el corazon de los hermanos de la iglesia. El Senor esta listo para aceptar su arrepentimiento.
Quisiera compartir conusted algunas notas de un discurso dado por el elder Dale E Miller del quorum de los setenta.
A medida que la conversion madura y se sostiene mediante las obras del Espiritu Santo, el alma se sana y encuentra la paz.
Tenemos el relato del Profeta Alma, hijo, cuando narra la experiencia de su conversion a su hijo Helaman. El dijo haber llegado a darse cuenta de manera dramatica de sus pecados y de errores del pasado, y confeso haberse rebelado contra Dios. Pero despues se acordo de haber oido a su padre Alma profetizar concerniente a la venida de un Jesucristo, el Hijo de Dios, quien vendria a expiar los pecados del mundo. Alma dijo: Y al concentrarse mi mente en este pensamiento, clame dentro de mi corazon, Oh Jesus, Hijo de Dios, ten misericordia de mi que estoy en la hiel de la amargura, y cenido con las eternas cadenas de la muerte! Alma experimento dolor y culpa eternos, pero se dio cuenta de que habia una posible salida mediante la Expiacion. Despues continua: Y he aqui que cuando pense esto, ya no me puede acordar mas de mis dolores, si, dejo de atormentarme el recuerdo de mis opecados. Y! Oh que gozo, y que luz tan maravillosa fue la que vi! Si, mi Alma se lleno de un gozo tan profundo como lo habia sido mi dolor. Alma 36.
Hermana, tengo la seguridad de queusted la proxima vez que pase por la capilla va a entrar y habra gozo en los cielos por una alma que se arrepiente.
Con Carino sincero, una hermana LDS