Dado que los mormones creen que Dios el Padre, Dios el Hijo y el Espíritu Santo son seres físicamente distintos, ¿no son politeístas? Después de todo, otros cristianos enseñan que hay un solo Dios el cual se divide en 3 entes para lograr sus objetivos.
One Response to “Dado que los mormones creen que Dios el Padre, Dios el Hijo …”
Ricardo Ramos
2010-11-29 03:58:05
Hola Amigo. No, los mormones no son politeístas, no más que otros cristianos. Las otras iglesias cristianas no oficialmente enseñan que hay "un solo dios el cual se divide en 3 entes para lograr sus objetivos". Esta idea se llama modalismo (Sabelianismo), y es una herejía que el cristianismo rechazó en el siglo IV. Aunque hay algunos cristianos que creen en el modalismo hoy, técnicamente no son trinitarios. Muchos teólogos cristianos dirían que son herejes.
Trinitarianismo en realidad enseña que Dios es al mismo tiempo uno y tres. Esto es esencialmente lo que creen los mormones. Creemos que Dios es uno (es decir, que Dios el Padre, Dios el Hijo y el Espíritu Santo función juntos en perfecta unidad de propósito como una unidad monoteísta) y que son tres (seres físicamente distintos). Nuestra concepción de la Trinidad es diferente a la descrita en el Credo de Nicea. Aceptamos una definición que es más similar a la noción de "Trinidad social" descrita por teólogos católicos y protestantes como Karl Rahner y Jürgen Moltmann. Sin embargo, aún somos en esencia trinitarios, y así, esencialmente monoteístas.
Trinitarianismo en realidad enseña que Dios es al mismo tiempo uno y tres. Esto es esencialmente lo que creen los mormones. Creemos que Dios es uno (es decir, que Dios el Padre, Dios el Hijo y el Espíritu Santo función juntos en perfecta unidad de propósito como una unidad monoteísta) y que son tres (seres físicamente distintos). Nuestra concepción de la Trinidad es diferente a la descrita en el Credo de Nicea. Aceptamos una definición que es más similar a la noción de "Trinidad social" descrita por teólogos católicos y protestantes como Karl Rahner y Jürgen Moltmann. Sin embargo, aún somos en esencia trinitarios, y así, esencialmente monoteístas.