Qué se puede hacer en un matrimonio sellado en el templo, donde uno de los cònyuges se ha alejado de la iglesia, se ha enamorado de otra persona, y aunque no está con ella, sigue pensando en esa persona. Y donde despuès de un tiempo, la otra parte del matrimonio tambièn se siente atraìda hacia otra persona? ¿Qué se puede rescatar de un matrimonio sin amor?
2 Responses to “Qué se puede hacer en un matrimonio sellado en el templo, d…”
Daniel Paz
2010-03-29 05:10:52
Hola amiga. Gracias por visitar mi sitio. El sellamiento es un compromiso sagrado entre un hombre, una mujer, y Dios. El simples desamor no es una buena razón para poner fin a un sellamiento. Los intereses románticos por otras personas no deben ser alimentados, y situaciones comprometedoras deben ser completamente evitadas. Hay ocasiones en que el divorcio es aceptable e incluso necesario, como los casos de abuso o infidelidad no arrepentida, pero el lazo del sellamiento debe ser más fuerte que el matrimonio solamente basado en la conveniencia.
Muchas veces una persona casada no puede controlar lo que su cónyuge hace. Un cónyuge puede optar por el pecado, dejando a su pareja sentirse rechazada y poco apreciada, pero recuerda que sólo somos responsables por nuestras propias decisiones. Si hacemos todo lo posible incluso en situaciones difíciles, Dios nos bendecirá en el final, incluso si nuestro cónyuge continúa por el camino equivocado.
Le recomiendo que hable con su obispo acerca de estos problemas. Tal vez usted y su cónyuge podían visitarlo juntos. Un consejero matrimonial profesional también podría ser capaz de ayudarles. También sugiero que hable con su pareja acerca de los retos que enfrentan y los problemas causadas por su inactividad en la iglesia. Tal vez sería beneficioso para explicarle que usted está comenzando a pensar sobre el divorcio, pero que esos pensamientos le molestan. Explíquele que usted desea salvar su matrimonio, si es posible. Mucha suerte para ti, amiga. Que Dios bendiga a usted y a su familia.
Marco Bustillos
2010-03-28 13:17:18
El templo en San Diego, California.
Hola, con respecto a esta pregunta, acaso cuando conocieron a su cónyuge actual ustedes amaban a quien iba a ser su cónyuge, lo que en esa ocasión sucedió fue una atracción que a medida que compartía su corto tiempo, se reían de todo, hablaban por mucho tiempo de muchos temas diferentes a lo que sucedería en lo futuro, nunca pensaron que se casarían o se sellarían solo pensaban en que la otra persona hera lo que ustedes requerían para el resto de su vida.
Ya como esposos o compañeros, encontraron una luz de esperanza, al pensar en que tendrían un hogar celestial para siempre, les recuerdo que al entrar en la santa casa del Señor, testificaron de lo maravilloso que se siente estar en su casa, saber que la otra persona sería nuestro cónyuge no solo por esta vida, sino, por la eternidad, luego, dejaron probablemente de tener conversaciones como las tenían antes de ser pareja, dejaron de sentir lo hermoso que es compartir tristezas, alegrías, pesares, permitieron que ese espíritu que sintieron al realizar promesas eternas no al obrero del tempo, ni al sellador, sino al nuestro Padre Celestial, se alejara, han perdido su testimonio, de la veracidad de esas promesas, tal vez ya no creen que lo que hicieron en el templo sea verdad, las cosas externas han tomado la vida de ustedes, ya no piensan en la gloria celestial, la promesa hecha de guardar sus compromisos y no profanar han dejado de ser importantes. Hermanos, el matrimonio se puede recuperar, ya que lo mas probables es que han perdido el rumbo, y si se preparan espiritualmente, el Padre Celestial, les permitirá recuperar ese sentimiento eterno y puro, cuando estuvieron en su casa nuestro enemigo común les dijo que si no guardan los mandamientos el personalmente poseería sus vidas,.
Recurran a su obispo, derramen todo su corazón a nuestro padre celestiañ, ya que nos ha prometido que todo lo que le pidamos al Padre en el nombre de Jesucristo si es justa, el nos lo va ha dar.
Cuando pidas al Padre que su petición sea para bendecir su hogar
28 Sed prudentes en los días de vuestra probación; despojaos de toda impureza; no pidáis para dar satisfacción a vuestras concupiscencias, sino pedid con una resolución inquebrantable, para que no cedáis a ninguna tentación, sino que sirváis al verdadero Dios cviviente.
Muchas veces una persona casada no puede controlar lo que su cónyuge hace. Un cónyuge puede optar por el pecado, dejando a su pareja sentirse rechazada y poco apreciada, pero recuerda que sólo somos responsables por nuestras propias decisiones. Si hacemos todo lo posible incluso en situaciones difíciles, Dios nos bendecirá en el final, incluso si nuestro cónyuge continúa por el camino equivocado.
Le recomiendo que hable con su obispo acerca de estos problemas. Tal vez usted y su cónyuge podían visitarlo juntos. Un consejero matrimonial profesional también podría ser capaz de ayudarles. También sugiero que hable con su pareja acerca de los retos que enfrentan y los problemas causadas por su inactividad en la iglesia. Tal vez sería beneficioso para explicarle que usted está comenzando a pensar sobre el divorcio, pero que esos pensamientos le molestan. Explíquele que usted desea salvar su matrimonio, si es posible. Mucha suerte para ti, amiga. Que Dios bendiga a usted y a su familia.
Ya como esposos o compañeros, encontraron una luz de esperanza, al pensar en que tendrían un hogar celestial para siempre, les recuerdo que al entrar en la santa casa del Señor, testificaron de lo maravilloso que se siente estar en su casa, saber que la otra persona sería nuestro cónyuge no solo por esta vida, sino, por la eternidad, luego, dejaron probablemente de tener conversaciones como las tenían antes de ser pareja, dejaron de sentir lo hermoso que es compartir tristezas, alegrías, pesares, permitieron que ese espíritu que sintieron al realizar promesas eternas no al obrero del tempo, ni al sellador, sino al nuestro Padre Celestial, se alejara, han perdido su testimonio, de la veracidad de esas promesas, tal vez ya no creen que lo que hicieron en el templo sea verdad, las cosas externas han tomado la vida de ustedes, ya no piensan en la gloria celestial, la promesa hecha de guardar sus compromisos y no profanar han dejado de ser importantes. Hermanos, el matrimonio se puede recuperar, ya que lo mas probables es que han perdido el rumbo, y si se preparan espiritualmente, el Padre Celestial, les permitirá recuperar ese sentimiento eterno y puro, cuando estuvieron en su casa nuestro enemigo común les dijo que si no guardan los mandamientos el personalmente poseería sus vidas,.
Recurran a su obispo, derramen todo su corazón a nuestro padre celestiañ, ya que nos ha prometido que todo lo que le pidamos al Padre en el nombre de Jesucristo si es justa, el nos lo va ha dar.
Cuando pidas al Padre que su petición sea para bendecir su hogar
28 Sed prudentes en los días de vuestra probación; despojaos de toda impureza; no pidáis para dar satisfacción a vuestras concupiscencias, sino pedid con una resolución inquebrantable, para que no cedáis a ninguna tentación, sino que sirváis al verdadero Dios cviviente.
(Libro de Mormón | Mormón 9:28)