Muy buenas tardes Hermanos, escribo esta pregunta porque actualmente me siento desmotivada y con mucho dolor que me han causado mis pecados.
He sido criada dentro del Evangelio desde que nací, fui miembro activo durante toda mi vida, recibí mi medallon de la mujer virtuosa, serví una misión, y un año y poco después de haber retornado con honor, conocí al que hoy es mi esposo, miembro activo de la iglesia con el que tengo ya 6 meses de casada.
Toda nuestra relación de noviasgo transcurrió con normalidad hasta unos pocos meses antes de casarnos, en que el y yo violamos la ley de castidad. Nos pusimos muchas metas, y nos esforzamos al máximo por continuar nuestros planes de boda, y seguir dentro de la iglesia, hasta que llegó el día de nuestra boda y sellamiento. Nos sellamos en el templo sin haber confesado. Muchas cosas han transcurrido desde entonces, hace más de 2 meses que no asistimos a la iglesia, porque no nos sentimos dignos de poder asistir. Queremos arreglar nuestra situación pero no sabemos cómo enfrentarla, que hacer, y cuál será el proceso.
Por favor, necesitamos ayuda y saber cómo podemos arreglar nuestra situación con Dios, con la iglesia y con nosotros mismos.
One Response to “Muy buenas tardes Hermanos, escribo esta pregunta porque…”
Leonardo Leal
2019-05-12 10:41:09
Una vida de pecado puede ser limpia y cambiarse por medio de la expiación de Jesucristo.
Hola hermana. Muchas gracias por publicar su pregunta. Es excelente que ustedes quieran volver al camino espiritual correcto.
Lo siento que ustedes han cometido este pecado grave. Les animo a conversar con su obispo inmediatamente. No permitan que la vergüenza les impida pedir la ayuda que necesitan. El obispo es el que Dios ha autorizado para ayudarles a aplicar la expiación de Cristo en sus vidas.
El amor que Dios tiene para ustedes es infinito. Su amor no depende de lo que ustedes hacen o lo que son. Porque Él les ama tanto, envió a Su Hijo Jesucristo para pagar por sus pecados.
Uno de los más hermosos versos en toda la Escritura es: "Vengan ahora, y pongamos las cosas en claro. Si sus pecados son como la grana, se pondrán blancos como la nieve. Si son rojos como el carmesí, se pondrán blancos como la lana." (Isaías 1:18).
Lo siento que ustedes han cometido este pecado grave. Les animo a conversar con su obispo inmediatamente. No permitan que la vergüenza les impida pedir la ayuda que necesitan. El obispo es el que Dios ha autorizado para ayudarles a aplicar la expiación de Cristo en sus vidas.
El amor que Dios tiene para ustedes es infinito. Su amor no depende de lo que ustedes hacen o lo que son. Porque Él les ama tanto, envió a Su Hijo Jesucristo para pagar por sus pecados.
Uno de los más hermosos versos en toda la Escritura es: "Vengan ahora, y pongamos las cosas en claro. Si sus pecados son como la grana, se pondrán blancos como la nieve. Si son rojos como el carmesí, se pondrán blancos como la lana." (Isaías 1:18).
Hace poco escribí un artículo acerca de cómo recuperarse espiritualmente de un pecado grave. Tal vez pueda ayudarles.
Déjame saber si hay algo más que yo pueda hacer. Que Dios esté con ustedes durante este tiempo difícil.