Tengo 6 meses de haberme sellado en el templo, antes de casarme supe que mi esposo era adicto a la pornografía y la masturbación decidí perdonarlo y el comenzó su proceso del arrepentimiento, y prometió nunca mas hacerlo. Pero ahora tuvo una recaída y esta otra vez en lo mismo. No se que hacer tengo mucho dolor…
One Response to “Tengo 6 meses de haberme sellado en el templo, antes de…”
Daniel Rios
2014-11-30 17:26:11
Una vida de pecado puede ser limpia y cambiarse por medio de la expiación de Jesucristo.
Hola hermana. Lo siento saber que su matrimonio esta con dificultades. La pornografía hace un gran daño a los matrimonios, como usted bien sabe. Voy a orar por usted durante estos tiempos difíciles.
Élder Richard G. Scott dijo algo que realmente me llamó la atención: "...el Señor ve las debilidades en forma diferente a como ve la rebelión. Si bien el Señor advierte que las rebeliones de las que no se arrepientan recibirán un castigo, cuando habla de debilidades, siempre lo hace con misericordia." Tal vez este mismo principio se aplica a su situación. Si su marido está en rebelión abierta--si él no tiene ningún deseo de arrepentirse y tiene la intención de proceder en este pecado--podría ser el momento para una franca "intervención", como hacen para los alcohólicos. Él tiene que entender que su comportamiento es destructivo a los otros, si alguna vez tendrá la fuerza para cambiar.
Por otro lado, es quizás una debilidad en vez de una rebelión. Si él tiene el deseo de recuperarse de este pecado pero lucha por debilidad personal, él podría beneficiarse mucho de su ayuda. Hable abiertamente sobre este reto con él, conversen con su obispo para recibir apoyo espiritual, y continúe animándolo a arrepentirse. Si él tiene el deseo de cambiar, hay una esperanza de recuperación.
Élder Richard G. Scott dijo algo que realmente me llamó la atención: "...el Señor ve las debilidades en forma diferente a como ve la rebelión. Si bien el Señor advierte que las rebeliones de las que no se arrepientan recibirán un castigo, cuando habla de debilidades, siempre lo hace con misericordia." Tal vez este mismo principio se aplica a su situación. Si su marido está en rebelión abierta--si él no tiene ningún deseo de arrepentirse y tiene la intención de proceder en este pecado--podría ser el momento para una franca "intervención", como hacen para los alcohólicos. Él tiene que entender que su comportamiento es destructivo a los otros, si alguna vez tendrá la fuerza para cambiar.
Por otro lado, es quizás una debilidad en vez de una rebelión. Si él tiene el deseo de recuperarse de este pecado pero lucha por debilidad personal, él podría beneficiarse mucho de su ayuda. Hable abiertamente sobre este reto con él, conversen con su obispo para recibir apoyo espiritual, y continúe animándolo a arrepentirse. Si él tiene el deseo de cambiar, hay una esperanza de recuperación.